La oración

Slamos 62 & 63

1 En Dios solamente espera en silencio mi alma;
De Él viene mi salvación.
Solo Él es mi roca y mi salvación,
Mi baluarte, nunca seré sacudido.

¿Hasta cuándo atacarán a un hombre,
Todos ustedes, para derribarlo,
Como pared inclinada, como cerca que se tambalea?
Ellos solamente consultan para derribarlo de su eminencia;
En la falsedad se deleitan;
Bendicen con la boca,
Pero por dentro maldicen. (Selah)

Alma mía, espera en silencio solamente en Dios,
Pues de Él viene mi esperanza.
Solo Él es mi roca y mi salvación,
Mi refugio, nunca seré sacudido.
En Dios descansan mi salvación y mi gloria;
La roca de mi fortaleza, mi refugio, está en Dios.
Confíen en Él en todo tiempo,
Oh pueblo; derramen su corazón delante de Él;
Dios es nuestro refugio. (Selah)

Los hombres de baja condición solo son vanidad, y los de alto rango son mentira;
En la balanza suben,
Todos juntos pesan menos que un soplo.
10 No confíen ustedes en la opresión,
Ni en el robo pongan su esperanza;
Si las riquezas aumentan, no pongan el corazón en ellas.

11 Una vez ha hablado Dios;
Dos veces he oído esto:
Que de Dios es el poder;
12 Y Tuya es, oh Señor, la misericordia,
Pues Tú pagas al hombre conforme a sus obras.

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1 Oh Dios, Tú eres mi Dios; te buscaré con afán.
Mi alma tiene sed de Ti, mi carne te anhela
Cual tierra seca y árida donde no hay agua.
Así te contemplaba en el santuario,
Para ver Tu poder y Tu gloria.
Porque Tu misericordia es mejor que la vida,
Mis labios te alabarán.
Así te bendeciré mientras viva,
En Tu nombre alzaré mis manos.
Como con médula y grasa está saciada mi alma;
Y con labios jubilosos te alaba mi boca.

Cuando en mi lecho me acuerdo de Ti,
En Ti medito durante las vigilias de la noche.
Porque Tú has sido mi ayuda,
Y a la sombra de Tus alas canto gozoso.
A Ti se aferra mi alma;
Tu diestra me sostiene.

Pero los que buscan mi vida para destruirla,
Caerán a las profundidades de la tierra.
10 Serán entregados al poder de la espada;
Presa serán de las zorras.
11 Pero el rey se regocijará en Dios;
Y todo el que por Él jura se gloriará,
Porque la boca de los que dicen mentiras será cerrada.