La ley y el Evangelio

Romanos 10:1-4 NBLA

10 Hermanos, el deseo de mi corazón y mi oración a Dios por ellos[a] es para su salvación. Porque yo testifico a su favor de que tienen celo de Dios, pero no conforme a un pleno conocimiento. Pues desconociendo la justicia de Dios y procurando establecer la suya propia, no se sometieron a la justicia de Dios. Porque Cristo es el fin[b] de la ley para justicia a todo aquel que cree.