Engrandeciendo la cruz

Isaías 6:1-5 NBLA

Visión de Isaías

En el año de la muerte del rey Uzías vi yo al Señor sentado sobre un trono alto y sublime, y la orla de Su manto llenaba el templo. Por encima de Él había[a] serafines. Cada uno tenía seis alas: con dos cubrían sus rostros, con dos cubrían sus pies y con dos volaban. Y el uno al otro daba voces, diciendo[b]:

«Santo, Santo, Santo es el Señor de los ejércitos,
Llena está toda la tierra de[c] Su gloria».

Y se estremecieron los cimientos[d] de los umbrales a la voz del que clamaba, y la casa se llenó de humo. Entonces dije:

«¡Ay de mí! Porque perdido estoy,
Pues soy hombre de labios inmundos
Y en medio de un pueblo de labios inmundos habito,
Porque mis ojos han visto al Rey, el Señor de los ejércitos».